Para practicar la meditación con una vela, o llama encendida, comienza aquietando la respiración poco a poco. Cuando sientas que su estado está más relajado, mira fijamente el objeto y trata de verlo en su totalidad, sin elaborar algún tipo de pensamiento, juicio o interpretación. Si algún pensamiento llega a la mente, simplemente déjalo pasar. Vuelve a concentrarte en el objeto. Hoy pondrás tu atención en la llama, en su movimiento, color, temperatura, aroma. Un ejercicio realmente gratificante.
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Subtítulos:
01 Stop al piloto automático
02 Analizar vs sentir
03 Luchar vs Aceptar
04 Pasado, presente y futuro
05 Los pensamientos y la realidad
06 Ser, estar y parecer
07 Poner la alarma
08 Escaneo Corporal
09 Solo ser
10 Alimentación consciente
11 Escucha activa
12 Observación activa
13 Ducha consciente
14 Escucha el silencio
15 Movimiento consciente
16 Atención al diálogo interno
17 Atención a las emociones
18 Paseo consciente
19 Vida social plena
20 Tareas rutinarias