Ducharse es un placer con obvios beneficios para nuestra salud, pero si sumas conciencia y pautas de meditación a este gesto cotidiano, la ducha será tu mayor aliada antiestrés y tu momento spa del día. El agua es un vehículo emocional natural que nos ayuda a relajarnos, a aflojar cada músculo, la mente y se lleva todo aquello que nos pertuba, todo el ruido mental. Convertirlo en un ritual es a la vez un reto y algo muy fácil porque nos duchamos cada día y está al alcance de todos, pero transformar costumbres automatizadas en hábitos conscientes marca la diferencia , la clave está en la intención. Nuestra experta en mindfulness te explicará cómo debes proceder para disfrutar de una ducha consciente, para que entres en el estado correcto desde el primer momento.
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Subtítulos:
01 Stop al piloto automático
02 Analizar vs sentir
03 Luchar vs Aceptar
04 Pasado, presente y futuro
05 Los pensamientos y la realidad
06 Ser, estar y parecer
07 Poner la alarma
08 Escaneo Corporal
09 Solo ser
10 Alimentación consciente
11 Escucha activa
12 Observación activa
14 Escucha el silencio
15 Movimiento consciente
16 Atención al diálogo interno
17 Atención a las emociones
18 Paseo consciente
19 Vida social plena
20 Tareas rutinarias
21 Mindfulness en el trabajo
