Abrazar árboles como terapia de sanación
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28 de septiembre de 2020
La madre tierra es una inagotable fuente de energía y curación a la que debemos escuchar y cuidar. La técnica de abrazar árboles es una práctica que se originó en China y se ha popularizado en todo el mundo. También conocida como "meditación del árbol" o "qigong del árbol", la técnica implica abrazar un árbol y conectar con su energía y fuerza vital.
La práctica de abrazar árboles se considera una forma de qigong, que es una práctica china que combina movimiento, respiración y meditación para mejorar la salud y el bienestar.
Terapia de abrazar árboles:
La técnica de abrazar árboles se realiza de la siguiente manera:
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Encuentra un árbol: Busca un árbol que te atraiga y que sea lo suficientemente grande para que puedas abrazarlo cómodamente.
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Conéctate con el árbol: Párate frente al árbol y cierra los ojos. Respira profundamente y siente tu conexión con el árbol. Imagina que tus pies están enraizados en el suelo, al igual que las raíces del árbol.
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Abraza el árbol: Abraza el árbol con tus brazos, preferiblemente sin zapatos. Mantén tu espalda recta y asegúrate de que tu corazón esté en contacto con el tronco del árbol. Respira profundamente y relájate en el abrazo.
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Permanece en el abrazo: Permanece abrazando al árbol durante al menos 10 minutos. Respira profundamente y siente la energía del árbol que fluye en tu cuerpo. Siente la fuerza y la estabilidad del árbol y permítete sentir su presencia y energía.
Beneficios de abrazar árboles o arboterapida:
La técnica de abrazar árboles se considera una forma de meditación y se cree que tiene varios beneficios para la salud, incluyendo la reducción del estrés, la ansiedad y la presión arterial, y la mejora del sueño. También se cree que la técnica ayuda a fortalecer la conexión con la naturaleza y a aumentar la sensación de paz y bienestar.
No tengas vergüenza de acariciarlo, hablarle, susurrarle y dejar salir todas tus emociones. Si te sientes más cómodo puedes buscar un sitio tranquilo y apartado donde nadie sea testigo del fluir de energía, de esa forma, serás más libre para abrirte a la naturaleza.
Si quieres tratar alguna dolencia en concreto, estos árboles podrán ayudarte:
- Abeto: favorece la curación de fracturas y reduce el hinchazón.
- Acacia: equilibra la temperatura corporal.
- Arce: alivia el dolor.
- Ciprés: reduce la sensación de calor.
- Espino blanco: fortalece el intestino y ayuda la digestión.
- Higuera: purifica el corazón y elimina la humedad del cuerpo.
- Olmo: vigoriza el estómago.
- Pino: tiene una gran capacidad de curación. Este árbol está considerado por la medicina china como inmortal.
- Sauce: elimina del cuerpo el exceso de humedad, reduce la presión arterial y fortalece el tracto urinario.
Para los más incrédulos, apuntar que la ciencia ha demostrado los beneficios que esta práctica nos aporta. En el libro “Blinded by Science” su autor, Matthew Silverstone expone diferentes comprobaciones sobre todo lo positivo que abrazar árboles aporta a nuestra vida.
Además, las plantas nos ofrecen numerosos remedios naturales que nos ayudan en nuestro día a día para curar un resfriado, calmar la tos o facilitarnos la digestión, entre sus innumerables beneficios. Si quieres aprender sobre el uso de las plantas, consulta nuestro curso de Plantas Medicinales.
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